martes, 13 de julio de 2010

Hoy. La piedra


Hoy soy como la piedra y tal vez más consciente que nunca de lo quiero en este mundo. Hoy soy como la tierra y el castigo no parece ser lo más siniestro, lo más vil y displiscente. Hoy parece que todo es diferente y que el suplicio ya no llena los cimientos del castillo ni el trinar de mis amaneceres.

Hoy la lucha ya no muere, mas se viste de caoba y de un son calmado y elegante. Hoy la piedra es importante y sin embargo humilde, sonriente y más locuaz. Hoy la vida me susurra a los oídos diciendo que ya no está celosa del color de sus atardeceres. Y el calor reposa concebido como un arma para la felicidad.

Hoy la lucha ya no duele. Hoy el llanto ya no marcha. Hoy la luz es esperanza y tus manos traen a mí toda la belleza del silencio. Hoy ya no hay odio sino agradecimiento. Y es que sin todos los agentes, sin cada uno de los que caminaron conmigo, no sería el mismo. Y la piedra no sería hoy el centro y el color.

Gracias, pues es hoy que por ustedes soy como la piedra y no busco ni quiero más que serlo eternamente.

No hay comentarios: