lunes, 19 de marzo de 2012

Temporal---()


La palabra durmió tu letargo.
Rompió su templanza en mil.
Los mil y un pedazos de garganta
se quedaron en mis ojos, 
en la luna, en el naranja y el añil.

Cuando quise mirarte eras bemol.
Eras luz, eras pasión, eras desánimo.
Eras todo lo real, lo inconsistente y lo extraño.
El sur, el norte, el llano y el poder.

Te vi y sentí miedo. Sentí miedo de caer.
De no entender la posibilidad liberada ni el futuro.
Me sentí pequeño, roto como un pedazo de espejo.
Tu esperanza mató la mía. La niebla cubrió las retinas
y el invierno comenzó.

Ahora le pregunto a los minutos, a las hojas y al papel:
Será que el calor que siento se irá a perder,
se irá a enfriar en mi rostro, se irá a apagar en la fogata?
Será que todo se acabará poco antes de haber empezado? 

Sólo sé que será una larga temporada.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vuelve a escribir. Acá hay una fanática secreta.